Los especialistas en la materia no cejan en su empeño de poner de manifiesto que el estilo de vida moderno, cómodo, sedentario e, incluso en algunas ocasiones, escasamente saludable es una de las causas principales de las problemáticas relacionadas con dolores musculares y articulares. La realidad es que pasamos demasiado tiempo sentadas, ya sea en nuestra casa o en nuestra oficina y olvidamos que el cuerpo es una herramienta que necesita movimiento y dinamismo, de ahí que la práctica de ejercicio sea vital.

Las dolencias en la columna vertebral no escapan a este diagnóstico que, en definitiva, pueden verse agravadas por otro factor fundamental: el estrés. Ya sea de origen laboral, familiar, emocional, físico o ambiental, los cambios neurológicos que éste nos causa pueden acelerar la aparición de dolencias en la columna al provocar hernias, desgaste o causando numerosos casos de pinzamientos.

Patologías frecuentes en la columna vertebral

Uno de los casos más habituales relacionado con dolencias en la columna vertebral deviene en la escoliosis. Se trata de una desviación anormal y progresiva que se puede dar tanto en la zona lumbar como en la dorsal. Aunque puede afectar a cualquier persona y a cualquier edad, lo normal es que en la mayor parte de los casos las afectadas sean mujeres en edad de crecimiento.

La lumbalgia, aunque suele tener su origen en una contractura muscular, es posible que haya sido producida a causa de una hernia de disco o un pinzamiento en los nervios de la columna vertebral.

El nervio ciático es uno de los más grandes del cuerpo humano, y como tal cuando se encuentra inflamado produce la llamada ciática. Este fuerte dolor, muy común en las mujeres, se origina cuando las raíces de este nervio están pinzadas en la salida de los laterales de la columna vertebral.

Cuando un disco situado entre dos vértebras se desplaza se produce lo que se ha dado en llamar la hernia de disco. Ésta produce un dolor agudo al presionar la raíz del nervio que sale de la medula espinal.

Prevención del dolor de espalda en la columna

Para evitar los problemas relacionados con la columna vertebral resulta muy útil la práctica de ejercicios que trabajen el cuerpo simétricamente. La natación, el pilates o el yoga son deportes tremendamente completos y pueden fortalecer esta zona.

Evitar el uso de tacones –combinándolos frecuentemente con calzado plano-, mantener posturas correctas tanto en casa como en el trabajo, usar carros con ruedas para transportar cargas pesadas, descansar en un colchón adecuado y, ante todo, llevar una vida sana y equilibrada en la que se procure evitar el tabaco y el alcohol resultan condiciones básicas si se quiere lograr un correcto cuidado de la columna vertebral.